Conozca “El Templo de la Luna” en el Huayna Picchu

El Templo de la Luna” en el Huayna Picchu

Escuchamos Machu Picchu y nos viene a la memoria la imagen que todos conocemos, de una ciudadela en lo alto de una montaña rodeada de vegetación y teniendo como fondo al imponente Huayna Picchu, el cual también guarda muchos secretos a través de ruinas que rodean la falda de esta montaña.

Es así que en la ladera del norte del cerro Huayna Picchu hay unas hermosas construcciones empotradas en la montaña, debajo de un peñasco gigantesco que le sirve de techo, ahí se encuentra uno de los más bellos ejemplos de la arquitectura andina, la cual es denominada “El Templo de la Luna”.

Las piedras que forman los muros y las hornacinas, están calzadas de manera perfecta una con otra y cuidadosamente pulidas y dando la impresión como por arte de magia que la parte alta de los muros se hubieran amoldado al contorno de la roca.

Templo de la Luna en el Huayna Picchu

Asimismo, en la entrada del templo hay también rocas labradas con formas de asientos. En las afueras de la cueva hay una piedra grande labrada y una portada de doble marco que mira a las montañas al otro lado del cañón como si estuviera allí para darle la bienvenida a los visitantes que llegan desde el fondo del valle.

Y aunque no se ha limpiado algunos caminos de la selva que cubre los alrededores, una larga escalinata nos lleva hacia un nivel inferior donde hay otras construcciones en ruinas.

Su otro nombre “La Gran Caverna”

A este lugar llega poca gente, no es muy conocido y como ya se había mencionado, algunos lo llaman “El Templo de la Luna”, aunque los expertos consideran que el término no es el adecuado por lo que lo denominan la “Gran Caverna”.

Templo de la Luna en el Huayna Picchu

El antropólogo y jefe del Parque Arqueológico de Machu Picchu, Fernando Astete, y los arqueólogos Julinho Zapata y Alfredo Mormontoy sostienen que no hay evidencia arqueológica para sugerir que este lugar haya sido un templo dedicado a la luna, nombre que fue puesto por el investigador estadounidense Hiram Bingham que llegó al sitio a principios del siglo XX.

Mormontoy manifestó que la luna sale por el este y la Gran Caverna está orientada hacia el oeste. “Solo un mínimo de luz de luna entra al lugar, pero ya en la madrugada, casi al amanecer. Es difícil afirmar que fuera para la luna”, agregó.

Además, no se tiene claro cómo empezó a llamársele Templo de la Luna a la Gran Caverna. Dicen algunos que, aparentemente, hace más de 70 años el dueño de un hotel lo habría denominado así para hacerlo más atractivo.

¿Cómo llegar?

Para llegar al lugar no es fácil, primero se tiene que subir al Huayna Picchu y es después que en el descenso de la cumbre que uno se encuentra con dos letreros que señalan rumbos diferentes, uno indica la dirección hacia Machu Picchu, mientras que el otro marca la dirección hacia la Gran Caverna. El descenso un camino bastante incómodo y regresar a la ciudadela inca puede tomar hasta dos horas.

Templo de la Luna en el Huayna Picchu

Más datos

Para algunas de las estructuras de la Gran Caverna se utilizaron la piedra de granito y según el geólogo Gilber Carpio, el metro cúbico de esa piedra pesa cerca de cuatro toneladas.

Las dimensiones aproximadas de la Gran Caverna son: 7 m de ancho, 12 m de largo y 2,5 m de alto.

Algunos creen que todo esto fue abandonado mientras se estaba siendo construido hace varios siglos, las razones son desconocidas y pese a los esfuerzos no hay respuestas claras para la ciencia.

Vídeo del Templo de la Luna

Conoce la maravillosa estructura que construyeron los incas en las alturas del Huayna Picchu, mediante el siguiente canal de Matergia Realismo Fantástico en Youtube.

¿Te atreves a subir hasta el Huayna Picchu y conocer este templo? ¿Qué te ha impresionado de este lugar?. Cuéntanos en el recuadro de los comentarios y no te olvides de compartirlo por favor, en las redes sociales. Gracias por tu visita.

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