¿Cómo visitar el Monasterio de Santa Catalina en Arequipa?
¿Te imaginas visitar un lugar que te transporte al pasado, que te muestre la belleza de una cultura y que te sorprenda con su arquitectura? Eso es lo que me pasó cuando conocí el Monasterio de Santa Catalina en Arequipa, Perú. Este lugar es un complejo religioso que fue fundado en el siglo XVI y que está construido con sillar, una piedra volcánica típica de la zona.
En este artículo te voy a contar todo lo que vi y aprendí sobre este increíble sitio: su historia, sus características, cómo llegar, los horarios y el precio de las entradas.
Además, ofrece programas educativos, una aplicación móvil, tienda de souvenirs y postres tradicionales. Si quieres saber más, sigue leyendo, ya que toda la información que quieres la encontrarás aquí en Peruenvideos.com.
Historia del Monasterio de Santa Catalina en Arequipa
Ocupando 20,000 metros cuadrados, se divide en cuatro barrios que imitan la distribución urbana colonial. En su interior se encuentran calles de colores vibrantes, patios llenos de flores, habitaciones y una iglesia del siglo XVII.
El Monasterio de Santa Catalina tiene una fascinante historia que se remonta a su fundación en el siglo XVI. A lo largo de los años, ha sido testigo de diversos cambios y transformaciones que le han dado su carácter distintivo y una importancia histórica y cultural en la ciudad de Arequipa.
💡 ¿Sabías que las casonas de Arequipa son un tesoro arquitectónico y cultural? Descubre su historia y belleza en este artículo de Perú en Videos. 👍
Fundación y primeros años del monasterio
Según información del portal santacatalina.org.pe, el monasterio fue fundado el 10 de septiembre de 1579 por María de Guzmán, viuda del hidalgo Diego Hernández de Mendoza. Su propósito fue albergar a las hijas de las familias nobles de Arequipa.
El objetivo principal de este convento de clausura fue proporcionarles una vida religiosa y espiritual en un entorno apartado del mundo exterior. Actualmente, aún conserva su sector de clausura donde hay novicias de velo blanco y monjas profesas de velo negro.
El Monasterio de Santa Catalina fue construido con material el sillar, es decir, piedra volcánica. Su estructura se asemeja a una ciudadela con sus callejuelas, patios y viviendas.
Transformaciones y cambios a lo largo de los siglos
A lo largo de los siglos, el Monasterio de Santa Catalina ha experimentado varias transformaciones y modificaciones en su estructura. Desde su fundación, se han realizado obras de ampliación y renovación que han contribuido a su crecimiento y adaptación a las necesidades de la comunidad religiosa que lo habitaba.
Importancia histórica y cultural del monasterio en Arequipa
El Monasterio de Santa Catalina ha dejado una huella significativa en la historia y la cultura de Arequipa. Durante la época colonial, el monasterio se convirtió en un centro de educación y cultura, donde las monjas recibían formación en diversos campos del conocimiento.
El conjunto ocupa casi 4 manzanas virreinales y en su mayor esplendor vivieron en este lugar 500 mujeres, aunque no todas fueron religiosas, pues bajo la estructura social colonial, las otras eran doncellas, sirvientas y esclavas de las religiosas. Había también niñas educadas en una especie de internado y aquellas refugiadas por derecho de asilo.
Además, su arquitectura y estilo arquitectónico han sido considerados únicos y representativos del barroco mestizo, lo que le otorga un valor cultural y artístico notable.
En el claustro de las novicias se puede apreciar las celdas donde vivían, se continúa por callejuelas ya que todo está construido como una pequeña ciudad que ha permanecido detenida en el tiempo.
Fue en 1970 que se abrió el convento para visitarlo, recuperarlo y mantenerlo. Caminar por sus calles hace al visitante sentir que pasa por una vieja calle europea.
💡 Conoce la casa del fundador de Arequipa, una joya histórica y cultural. Te sorprenderá su arquitectura y su pasado. 👌
Arquitectura única del Monasterio de Santa Catalina
El Monasterio de Santa Catalina se destaca por su arquitectura singular, la cual refleja la riqueza cultural e histórica de la región. A continuación, exploraremos los elementos destacados de esta arquitectura única.
Uso de sillar en la construcción del monasterio
El sillar, una piedra volcánica característica de Arequipa, fue el material principal utilizado en la construcción del Monasterio de Santa Catalina.
Esta piedra, de tonalidad blanca y textura suave, crea una apariencia distintiva en los muros y edificios del monasterio. Su uso no solo proporciona resistencia y durabilidad, sino que también realza la belleza estética del complejo.
Distribución urbana en los barrios del monasterio
El monasterio está dividido en cuatro barrios que imitan la distribución urbana de la época colonial en Arequipa. Estos barrios, con sus calles de colores vibrantes y patios llenos de flores, recrean la atmósfera de una pequeña ciudad dentro del monasterio.
Cada barrio alberga diferentes áreas funcionales, tales como áreas de residencia, talleres, cocinas y espacios de recreación, brindando una visión completa de la vida de las religiosas en siglos pasados.
Elementos destacados: calles, patios, jardines y habitaciones
Caminar por las calles del Monasterio de Santa Catalina es como adentrarse en una pintoresca escena colonial. Lo principales lugares para conocer son:
- La Portada del Monasterio
- El Claustro los Naranjos
- El Patio El Silencio
- El Claustro Mayor
- La cocina
- La lavandería
- La torre del campanario y,
- La iglesia.
La Portada del Monasterio
La portada del monasterio de Santa Catalina es una obra de arte tallada en sillar, la piedra volcánica que caracteriza la arquitectura de Arequipa.
La portada se encuentra en la entrada principal del monasterio, que ocupa una manzana entera en el centro histórico de la ciudad.
Este frontis fue construido en el siglo XVII y tiene un estilo barroco mestizo, con influencias andinas y europeas.
En el centro de la portada se puede ver la imagen de Santa Catalina de Siena, la patrona del monasterio, rodeada de ángeles y flores.
Santa Catalina sostiene una rama de olivo y una corona de espinas, símbolos de su paz y su pasión por Cristo. Sobre ella hay una inscripción en latín que dice: «Sponsa Christi, ora pro nobis«, que significa: «Esposa de Cristo, ruega por nosotros«.
La fachada también tiene otros elementos decorativos, como columnas, arcos, cornisas y escudos.
Claustro Los Naranjos
El claustro de Los Naranjos es uno de los espacios más emblemáticos del Monasterio de Santa Catalina. Su nombre se debe a la presencia de árboles de naranjo que adornan el patio central, donde se levantan tres cruces de madera.
Estas cruces son el escenario de una tradición religiosa que se remonta al siglo XVIII, cuando las monjas representaban la Pasión de Cristo todos los Viernes Santo.
Este claustro data de 1738 y fue construido con sillar rosado, una piedra volcánica típica de la arquitectura arequipeña.
Su estilo es barroco mestizo, con influencias españolas y nativas. El claustro está rodeado de celdas, capillas y salas de reunión, donde las monjas vivían en reclusión y oración.
El claustro de Los Naranjos es un lugar lleno de historia, arte y espiritualidad, que refleja la vida conventual de siglos pasados.
💡 A propósito de los árboles de naranjos te invito a leer el artículo sobre los beneficios de consumir naranjas para la salud. Las naranjas son una estupenda fuete de vitamina C.
Patio El Silencio
El Patio El Silencio es un lugar sagrado donde las monjas de clausura del Monasterio de Santa Catalina practicaban la meditación y la contemplación. Su nombre se debe al voto de silencio que debían guardar las religiosas, que solo podían hablar con permiso de la priora.
El patio está rodeado de arcos de sillar y tiene una fuente central de piedra, que simboliza el agua viva de Cristo. En este patio se respira una atmósfera de paz y serenidad, que invita al recogimiento y la oración.
En el Patio El Silencio se pueden apreciar también algunas obras de arte religioso, como el lienzo de la Virgen del Rosario, que preside el espacio desde una hornacina. También hay pinturas de santos y mártires, que inspiraban a las monjas en su camino de fe.
El patio tiene una iluminación natural que varía según la hora del día, creando diferentes efectos de luz y sombra. El Patio El Silencio es uno de los rincones más bellos y espirituales del Monasterio de Santa Catalina.
Claustro Principal
El claustro mayor es el más grande y antiguo del monasterio de Santa Catalina, construido entre 1715 y 1723 con sillar rosado, una piedra volcánica típica de la arquitectura arequipeña. Su estilo es barroco mestizo, con influencias españolas y nativas.
El claustro está decorado con pinturas murales que representan escenas de la vida de Santa Catalina de Siena, la patrona del monasterio. En el centro del claustro hay una fuente de piedra con una escultura de la Virgen del Rosario, rodeada de flores y plantas.
El claustro mayor fue el lugar donde las monjas realizaban sus actividades cotidianas, como el estudio, la lectura, la costura y la pintura. También era el espacio donde se celebraban las fiestas religiosas y se recibían a las visitas ilustres.
El claustro mayor conserva el mobiliario original de las monjas, como los escritorios, las sillas, las camas y los baúles. El claustro mayor es un testimonio de la historia, el arte y la cultura del monasterio de Santa Catalina, que se ha mantenido intacto por más de tres siglos.
La cocina
La cocina del monasterio de Santa Catalina es un lugar que nos transporta al pasado, cuando las monjas preparaban sus alimentos con carbón, leña y otros combustibles. Las paredes están cubiertas de hollín y se conservan los utensilios originales de la época, como ollas, sartenes, cucharas y cuchillos. La cocina tiene una bóveda alta que sugiere que fue diseñada como una capilla.
En la cocina del monasterio se pueden apreciar también algunos detalles decorativos, como pinturas murales que representan escenas de la vida de Santa Catalina de Siena, la patrona del monasterio.
También hay una chimenea con una imagen de la Virgen del Rosario, que era la protectora de las monjas. La cocina del monasterio es un testimonio de la historia, el arte y la cultura de este lugar sagrado.
La Lavandería
La lavandería era un lugar donde las monjas y sus sirvientas lavaban sus ropas con el agua que provenía de un pequeño riachuelo que circulaba por el convento.
La lavandería se construyó en 1770, cuando Arequipa se abastecía de agua mediante acequias. La lavandería está formada por un canal de piedra rodeado de veinte tinajas de barro, que servían para remojar, enjabonar y enjuagar las prendas.
La lavandería se ubicaba al final de la calle Burgos, una de las seis calles que evocan ciudades españolas dentro del monasterio.
La calle Burgos se caracteriza por sus faroles de forja artística de fierro, que iluminaban el camino de las religiosas. La lavandería era un espacio de trabajo, pero también de convivencia y comunicación entre las monjas, que compartían sus experiencias y sus oraciones mientras realizaban sus labores domésticas.
Locutorio
Por este sector del convento se comunicaban las religiosas con el mundo exterior. La comunicación ocurría a través del doble enrejado. En tanto, los tornos en ese lugar era para realizar el intercambio de diversos productos.
Asimismo, se observa una semi-penumbra debido a la filtración de la luz a través de un tipo de alabastro denominado «Piedra de Huamanga».
Las Calles
Sus calles empedradas y estrechas, adornadas con macetas de flores, dan testimonio del pasado histórico del lugar.
¿Cuántas calles tiene el Monasterio de Santa Catalina?
Dentro de sus muros de 4 metros de altura se hallan 6 calles con nombres como Córdoba, Málaga, Toledo, Granada, Sevilla y Burgos.
Estas calles hacen referencia a ciudades españolas, debido al origen virreinal del recinto. Cada calle tiene su propio encanto y colorido, y se puede apreciar la arquitectura colonial y las flores de texao que adornan los muros.
Los patios y jardines, llenos de vegetación tropical y fuentes serenas, crean espacios de tranquilidad y belleza. Además, las habitaciones individuales y colectivas, con su mobiliario antiguo y decoraciones auténticas, brindan una visión apasionante de cómo vivían las monjas en el monasterio durante siglos pasados.
Las celdas de las monjas
La celda era igual para todas: tenía una hornacina, una alacena y un arco. Algunas tenían detalles especiales y distintivos. También había un horno pequeño de barro.
Las monjas de Santa Catalina eran muy conocidas por hacer pasteles, panecillos, tortas, bizcochos, etc. En el fondo de una de las habitaciones, en la última alacena, se pueden ver unos recipientes antiguos, entre ellos uno hecho en Londres en 1905.
La botica
En el jardín del convento se cultivaban muchas hierbas medicinales que se usaban para curar dolores y enfermedades. Para hacer los remedios se procesaban las hierbas en alambiques, de los que se sacaba vapor que se convertía en líquido.
Los frascos que se exhiben en el convento son todos originales y muchos de ellos todavía tienen los productos que guardaban.
Las medicinas las hacían el boticario asignado o las propias monjas, y las enfermas eran cuidadas por la enfermera del convento. El médico solo podía entrar al convento si era necesario, y la enferma era atendida en presencia de otra monja.
¿Quién es Sor Ana de los Angeles?
La beata Sor Ana de los Ángeles Monteagudo fue una religiosa católica peruana que vivió en el siglo XVII. Nació en Arequipa el 26 de julio de 1602, hija de un español y una peruana. Fue la cuarta de ocho hermanos. Desde niña mostró una gran devoción y caridad hacia los demás.
A los tres años fue entregada al Monasterio de Santa Catalina de Siena, donde recibió una educación cristiana. A los catorce años, sintió el llamado de Dios a consagrarse como monja dominica, después de tener una visión de Santa Catalina de Siena, que le mostró el hábito de la orden.
A pesar de la oposición de sus padres, que querían casarla con un hombre rico, logró escapar de su casa y entrar al monasterio, donde profesó sus votos en 1618.
Sor Ana de los Ángeles se destacó por su santidad, su sabiduría y su liderazgo. Ocupó varios cargos en el monasterio, como sacristana, maestra de novicias y priora. Fue una consejera espiritual de muchas personas, tanto dentro como fuera de la clausura.
Camino a la santidad
Se dice que realizó varios milagros, como curar enfermos, multiplicar alimentos, predecir el futuro y aparecerse a distancia.
También tuvo visiones místicas, en las que se le revelaron secretos del cielo y del infierno. Fue una defensora de la fe católica, especialmente durante la rebelión de Túpac Amaru II, que amenazaba con destruir el culto y las iglesias.
Murió el 10 de enero de 1686, a los 83 años, dejando un gran testimonio de amor a Dios y al prójimo.
Su fama de santidad se extendió por todo el Perú y más allá. Muchos fieles acudieron a su tumba para pedir su intercesión. En 1985, el papa Juan Pablo II la beatificó durante su visita apostólica al Perú, reconociendo sus virtudes heroicas y el milagro de la curación de una niña con cáncer.
Es la primera beata arequipeña y una de las más queridas del país. Su fiesta se celebra el 10 de enero. Su cuerpo incorrupto se conserva en la Iglesia del Monasterio de Santa Catalina, donde se puede visitar y venerar. Es considerada la patrona de Arequipa y de la educación católica.
Celda y Capilla de la Beata Sor Ana de los Angeles
Hoy en día la celda que perteneció a la beata Sor Ana de los Angeles Monteagudo, tiene una celda que ahora es una Capilla.
Muchos devotos vienen a rezar y a peregrinar a este santuario, donde se pueden ver las reliquias y los objetos que usó la beata arequipeña. Es un lugar sagrado y lleno de historia.
Palabras de Juan Pablo II que se observan en la entrada de la celda
«En ella admiramos sobre todo a la cristiana ejemplar, la contemplativa monja dominica del célebre Monasterio de Santa Catalina, monumento de arte y de piedad, del que los arequipeños se sienten con razón orgullosos«.
«Hoy la Iglesia en Arequipa y en todo el Perú desea adorar a Dios de una manera especial por los beneficios de una humilde religiosa. Es sor Ana de los Ángeles, la beata de la iglesia«.
Las monjas de clausura
Datos curiosos, según los letreros en el mismo recinto.
Lo que debía llevar una novicia
Para ingresar al convento, una novicia no solo tenía que pagar una dote y cien pesos corrientes para su sustento durante el año de prueba, sino también llevar un ajuar con veinticinco cosas.
Entre ellas, se encontraban dos hábitos con sus escapularios, una capa, dos túnicas de tela gruesa, dos jubones (prendas que cubrían el torso), dos tocas, dos pares de zapatos de corcho forrados de cuero, una caja de madera, una cortina de lana para adornar la cama, dos colchones, cuatro sábanas, dos almohadas, dos mantas, una colcha, un taburete, cuatro pares de botines y diez varas de ruan (tela de lana).
Elaboraban las hostias
Las monjas de Santa Catalina no solo se dedicaban a la oración y a la meditación, sino también a la elaboración de hostias para diferentes iglesias y conventos de la zona.
En el convento se muestran instrumentos usados en distintas épocas, desde tenazas que se calentaban al fuego hasta aparatos eléctricos. Hoy en día, las monjas siguen haciendo esta labor.
La iglesia del Monasterio de Santa Catalina
La iglesia del Monasterio de Santa Catalina, construida en el siglo XVII, es una de las joyas arquitectónicas más importantes de Arequipa. Su construcción y diseño reflejan la influencia de la época colonial, destacándose por su estilo barroco y su imponente estructura.
Construcción y características arquitectónicas
La iglesia se levanta imponente en el complejo del monasterio, con una fachada que destaca por su elegancia y detalles ornamentales. Sus muros están construidos con sillar, la característica piedra volcánica de la región, lo que le confiere una apariencia sólida y majestuosa.
En su interior, la iglesia cuenta con una nave principal amplia y espaciosa, en la que se distribuyen varios altares decorados con esculturas y pinturas religiosas. El techo de la iglesia está decorado con frescos que representan escenas bíblicas.
💡 ¿Sabes dónde se encuentra el volcán Misti? 🌋 Es uno de los símbolos de la ciudad de Arequipa y tiene una historia fascinante. Descubre más sobre este impresionante volcán en Perú en Videos.
Altar barroco y pinturas religiosas de la época colonial
El altar mayor de la iglesia es una verdadera obra de arte barroco, decorado con tallas de madera dorada y pinturas que representan escenas de la vida de Jesucristo y la Virgen María. Este altar es considerado uno de los más importantes y hermosos de la ciudad de Arequipa.
En las paredes de la iglesia se encuentran pinturas religiosas de la época colonial, que narran historias de santos y vírgenes venerados en la tradición católica.
Estas pinturas muestran la destreza artística de los artistas de la época y son un testimonio de la importancia del monasterio en la difusión de la fe religiosa en aquel entonces.
La cripta: lugar de descanso de las monjas del convento
Dentro de la iglesia, se encuentra también una cripta que alberga los restos de algunas monjas del convento. Este espacio sagrado es un lugar de recogimiento y respeto, donde se puede apreciar la devoción y la importancia de la vida religiosa en el monasterio.
Programas educativos y actividades para visitantes
El Monasterio de Santa Catalina en Arequipa ofrece una variedad de programas educativos y actividades especiales para escolares y visitantes en general.
Estas iniciativas permiten a los visitantes adentrarse en la historia y la vida del monasterio, proporcionando una experiencia enriquecedora y educativa.
Programas especiales para escolares
El monasterio ha desarrollado programas especialmente diseñados para escolares, con el objetivo de acercarles a la historia y la cultura del lugar.
Estas actividades incluyen visitas guiadas adaptadas a diferentes niveles educativos, donde los estudiantes pueden aprender sobre la vida cotidiana de las monjas y la importancia religiosa del monasterio.
Además, se ofrecen talleres interactivos donde los alumnos pueden participar en actividades prácticas relacionadas con la artesanía y la gastronomía tradicional arequipeña.
💡 ¿Ya conoces los requisitos para un viaje de promoción escolar? Te contamos los requerimientos y consejos para que tu experiencia sea inolvidable.✈
Recomendaciones para la visita al Monasterio de Santa Catalina
Para disfrutar al máximo de tu visita al Monasterio de Santa Catalina en Arequipa, te ofrecemos algunas recomendaciones importantes:
Preparativos: calzado, agua y protector solar
- Lleva calzado cómodo, ya que explorarás calles y patios empedrados.
- No olvides llevar contigo agua para mantenerte hidratado durante tu recorrido.
- Debido al clima soleado y cálido de Arequipa, es fundamental aplicar protector solar antes de ingresar al monasterio.
Importancia de contratar un guía turístico
Para aprovechar al máximo tu experiencia en el Monasterio de Santa Catalina, te recomiendo contratar los servicios de un guía turístico.
El guía te brindará información detallada sobre la historia y arquitectura del lugar, permitiéndote comprender mejor su importancia cultural y religiosa. Asimismo, responderá tus preguntas y te guiará por los rincones más interesantes del monasterio.
De hecho, buena parte de los aspectos relevantes de este lugar fue contado por uno de los guías oficiales de turismo, y los comparto en este artículo con todo lo que he aprendido durante mi recorrido por el complejo turístico religioso.
Tienda de souvenirs y degustación de postres tradicionales
Al finalizar tu visita, no olvides pasar por la tienda de souvenirs del Monasterio de Santa Catalina. Allí encontrarás una variedad de artículos que representan la cultura tradicional arequipeña, ideales para llevarte un recuerdo especial de tu visita.
Además, podrás disfrutar de una pausa y probar los deliciosos postres elaborados por las monjas que viven en el monasterio. No te pierdas la oportunidad de deleitarte con estos manjares tradicionales, como los alfajores o las tejas que son exquisitas. Muy recomendados.🤩
💡 ¿Ya probaste las tejas de Ica? 😋 Descubre por qué son tan deliciosas en Perú en Videos. 👌
El Monasterio de Santa Catalina en la actualidad
Importancia turística y religiosa
El Monasterio de Santa Catalina en Arequipa, es un lugar de gran importancia tanto para el turismo como para la religión. Miles de visitantes de todo el mundo llegan cada año para maravillarse con su arquitectura y sumergirse en su historia.
Además, es considerado un sitio sagrado y espiritual, donde las monjas residentes continúan dedicando su vida a la oración y la contemplación.
Su encanto y belleza que cautiva a los visitantes
El monasterio, con sus calles pintorescas, patios llenos de flores y jardines serenos, encanta a los visitantes desde el primer momento.
El colorido de sus fachadas y la tranquilidad del entorno crean una atmósfera única que transporta a los visitantes a siglos pasados. Cada rincón del monasterio es una muestra de la belleza arquitectónica y la delicadeza de la vida religiosa.
Su rol en la promoción de la cultura arequipeña
- Preservación del legado histórico: El Monasterio de Santa Catalina ha sido un testigo clave de la historia de Arequipa y su conservación contribuye a preservar la identidad cultural de la región.
- Impulso al turismo: La existencia del monasterio y su apertura al público ha impulsado el turismo en Arequipa, atrayendo a viajeros de todas partes y generando ingresos para la ciudad.
- Difusión de las tradiciones: A través de programas educativos y actividades especiales, el monasterio busca difundir las tradiciones y costumbres arequipeñas, proporcionando a los visitantes una experiencia enriquecedora y auténtica.
- Valoración de la artesanía local: La tienda del monasterio ofrece productos artesanales que expresan la cultura tradicional arequipeña, promoviendo el trabajo de los artesanos locales y valorando su labor.
Precio de las entradas
El Monasterio de Santa Catalina establece una tarifa de entrada para los visitantes. Esta política busca fomentar el acceso y la participación de todos los interesados en conocer la riqueza cultural y religiosa del monasterio.
Adultos extranjeros | S/45.00 |
Adultos peruanos | S/40.00 |
Estudiantes extranjeros (menores de 21 años) | S/25.00 |
Adultos mayores de 60 años | S/20.00 |
Universitarios peruanos (pregrado) | S/12.00 |
Escolares peruanos | S/6.00 |
Niños menores de 7 años | Ingreso libre. |
Días con promoción para peruanos:
Día 10 y último domingo de cada mes: 12 soles adulto y 5 soles escolares.
Horarios de atención
De lunes a domingo de 9:00 am a 5.00 pm
Jueves – Santa Catalina de Noche (Boletería hasta las 7:30 pm)
Servicio de guiado es opcional y no está incluido en el boleto.
Costo aproximado: 20 soles.
💡 Si buscas un hotel tranquilo, cómodo y con un hermoso jardín, te recomendamos el Hotel Casa de Avila. Disfruta de su hospitalidad y su excelente ubicación. 🌺
Cómo llegar
Si te encuentras en la Plaza de Armas de Arequipa, llegar al Convento de Santa Catalina te tomará sólo 5 minutos caminando por la calle Santa Catalina. Google Maps te indica la ruta.
Vídeo del Monasterio de Santa Catalina
Veamos un recorrido en el interior del convento de Santa Catalina a través del siguiente vídeo del canal Perú en Videos Oficial en Youtube.
¿Qué te ha parecido este lugar? ¿Habías escuchado anteriormente acerca de este monasterio? ¿Lo agendarías en tu próximo viaje?.
Puedes dejar tus comentarios en el recuadro que está más abajo. No te olvides seguir las redes sociales y gracias por visitar Perú en Videos.
Publicación original: 16 de noviembre de 2012
Actualización: 8 de octubre de 2023
Fuente: Experiencia propia durante mi visita y webs citadas en el artículo.